martes, 6 de mayo de 2008

Sobre Antonio Lobato




Aquí está la prueba que demuestra que Antonio Lobato no es de piedra. Durante las retransmisiones de muchos grandes premios hemos contemplado como un bellezón pasaba junto a Antonio por el paddock y él con su imperturbable profesionalidad se limitaba a decir indiferente... "por mi lado pasan las pitbabes, siempre presentes en los grandes premios", y seguía como si nada, como si aquello se viera todos los días en cualquier lugar. Pues aquí está la prueba que demuestra que detrás de las cámaras Antonio usa, como todo hijo de vecino, muy bien sus ojos para mirar lo que como no podía ser de otro modo se ha de mirar, y que son las pitbabes del Gran Premio de F1 de Turquía, en mi opinión las más bellas de todas las que se puedan admirar en cualquier circuito del Gran Circo.

Un fenómeno este Antonio.